Hace unos meses escribí para el diario La Razón una reflexión que, en los tiempos que estamos viviendo, se hace cada vez más actual y realista.
Estos días en los que todos estamos en nuestras casa, lejos de nuestros familiares y amigos es importante que demos valor a las pequeñas cosas que realmente son importantes. Como decía en ese momento “Debemos regresar a nuestro orígenes, a conmovernos con aquellos rostros inundados de hermosas sonrisas, a voces tarareando canciones pegadizas, a fotografías llenas de recuerdos cercanos…
Puedes leerla íntegramente aquí.