Leí una vez, que cuando no podemos expresar nuestros sentimientos porque las palabras se agolpan en la garganta, cuando no nos va a escuchar quien tiene que hacerlo o cuando, simplemente estás vacío, es mejor quedarse en silencio.
Luego lo mejor es escribirlo. Y funciona. Me funcionó en su momento.
Hoy, me he visto reflejada en las pupilas de un desconocido y me he reconocido, tiempo atrás, en una situación similar.
Por ello, he escrito estas letras. Para todas aquellas personas que necesitan decirse algo así mismas y a alguien en especial.
Siempre digo que en la vida los recuerdos sentimentales prevalecen sobre los materiales porque el paso del tiempo no puede borrarlos de nuestra esencia.
Y de nada sirve crear una existencia anhelada y perfecta, que se supone que nos habían vendido porque la realidad siempre suele ser otra. ¿No creéis?
Hay seres humanos a los cuales la gente no entiende, no alienta, no acompaña, no escucha, no acaricia y no quiere. Seres humanos diferentes, distintos y desconocidos.
Y es hay donde escribir cobra todo el sentido.
Recordad; las palabras están en todos los sitios de ti depende como fluyan en tu mente para que estás cobren significado en tu corazón.